LA ILUSIÓN VEGANA
O ¿COMO SE PUEDE SER VEGANO?
Eres vegano o vegana, porque rechazas el sufrimiento
animal. Con este cambio en tu alimentación, has hecho un acto militante para
decir que no eres un bárbaro, que respectas a los animales que son seres
sentientes (que tienen la capacidad de sufrir). Vas mucho más allá de lo que
hacen los vegetarianos, ya que rechazas cualquier alimento de origen animal
como los huevos, los lácteos, ya que te opones al principio de la ganadería.
Ese
respecto pasa, para ti, por un respecto más general de la Naturaleza, que hace
que rechazas normalmente también la agricultura convencional, ya
que lucha contra un gran número de animales, “enemigos” des los cultivos, sean
insectos, ácaros, roedores, gasterópodos u otros, gracias al empleo de
plaguicidas, de cebos o de trampas.
Te
provees a menudo directamente en la finca si tienes la posibilidad de hacerlo,
y en las tiendas de productos ecológicos sino.
Foto: http://www.vomhof.ch/fileadmin/Vomhof/Headerbilder/Hofladen_buehler.jpg
Aquí haces un primer error, ya que los agricultores
ecológicos tienen los mismo problemas y luchan también contra los “enemigos” de
los cultivos, sean insectos, ácaros, roedores, gasterópodos u otros, gracias al
empleo de plaguicidas, de cebos o de trampas. Muchos consumidores asocian la
agricultura ecológica con el no-uso de plaguicidas. Es totalmente falso. Sin
embargo, las encuestas de percepción de que es la agricultura ecológica
escasean. A continuación una encuesta reciente realizada en Francia muestra que
más de 50% de la población no sabe que la agricultura ecológica emplea
plaguicidas. (en francés)
La agricultura ecológica emplea plaguicidas cada vez que
la gestión del cultivo lo requiere, pero de origen natural, cuando los
agricultores convencionales, además de los productos naturales, tienen la
posibilidad de emplear productos de síntesis. Existe una larga lista de plaguicidas
autorizados en agricultura ecológica, que tienen los mismos efectos y a menudo
tienen los mismos defectos que los plaguicidas de síntesis. Pero son de origen
natural.
¿Por eso son mejores? No, solo son de origen natural e
incluso no siempre. Podríamos discutir mucho tiempo el origen natural de
productos como la deltametrina, el spinosad o las feromonas, muy empleados en
agricultura ecológica, pero cuya SÍNTESIS es totalmente industrial y química.
Puedes consultar
Pero me estoy alejando del tema.
Todo eso era para decir que compras alimentos ecológicos para seguir tu lógica filosófica. De esta
manera te aseguras que no tienes incidencia en relación con la explotación
animal y el maltrato a los animales.
¿De eso no hay duda?
Siento mucho decirte que te equivocas, en este punto
también. La agricultura ecológica emplea numerosos subproductos de ganadería. Y
en ganadería, los animales van a ser ordeñados, esquilados, explotados o
abatidos, ¿no?
Pero, ¿de qué subproductos estamos hablando?
Pues por ejemplo del estiércol, abono natural animal muy
conocido, cuyo origen no presenta duda alguna y que es la base misma de la
fertilización en cultivos ecológicos. Por supuesto el estiércol procederá de
ganadería ecológica, pero que sigue siendo ganadería, con todo lo que conlleva
y que rechazas frontalmente.
Foto: http://www.science-et-magie.com/PLANTES/images/fumier.jpg
Pero los estiércoles no son siempre equilibrados con
respecto a lo que necesita el cultivo. Pues puede ser necesario aportar
micro-elementos o aminoácidos, total complementos nutricionales para plantas.
Una forma efectiva, económica, y finalmente muy común para aportar todo esos es
la sangre. Sí, la sangre, un subproducto de los mataderos. Sangre de buey
especialmente, o de aves o de cordero, que no se usan con frecuencia en
alimentación humana, al revés de la sangre de cerdo.
Si el agricultor necesita reforzar la nutrición cálcica
de sus cultivos, con también un complemento en fósforo, puede aportar harina de
huesos, otro subproducto de los mataderos. La harina de huesos puede también
tener un efecto segundario interesante como repelente de roedores, que también
aprecian frutas y hortalizas ecológicas.
También se puede hablar de bioplaguicidas, con
propiedades fungicidas y bactericidas, de los que uno, recientemente
descubierto, y cada vez más empleado es el quitosano, un polímero natural
extracto de las cáscaras de crustáceos (gambas, langostinos, bogavantes,
cangrejos, etc.), con lo que es un subproducto de la industria de la pesca.
¡Qué
horror! ¿Quizás estés pensando ya en buscar refugio en la biodinámica, que por
lo menos, no emplea ni plaguicidas ni fertilizantes, incluso si son ecológicos? Es
cierto, en eso tienes toda la razón. La biodinámica es una agricultura a parte
que busca el equilibrio entre el cultivo y su entorno por vía específicas. Es
más difícil de encontrar, ya que la producción es muy marginal, y más difícil a
implementar por parte del agricultor, especialmente en frutas y hortalizas,
pero por lo menos, estamos seguros de lo que vamos a encontrar.
¿De eso no hay duda?
Dos de las preparaciones principales de la biodinámica,
sin las cuales no hay agricultura biodinámica, ya que son los elementos básicos
del método, son la bosta de cuerno (preparación 500) y la sílice de cuerno
(preparación 501).
Foto: http://unboutdebois.com/WordPress3/wp-content/uploads/2013/10/IMG_4267.jpg
Estas dos preparaciones, tal como lo indica el nombre,
emplean cuernos de vacas, y en gran cantidad. En un caso, el cuerno se llena
con bosta fresca (otro subproducto de la ganadería), en el otro con sílice,
antes de quedar enterradas durante varios meses, para seguir su proceso de
preparación, antes de extraer un principio activo que será pulverizado en los
cultivos.
¿Y dónde se encuentran cuernos en cantidades importantes?
En los mataderos, me lo temo…
La
biodinámica empleo 6 otras preparaciones, destinadas al compostaje. La preparación
502 necesita vejiga de ciervo, la 503 intestino delgado de buey, la 505 cráneos
de animales domesticados, y la 506 el mesenterio de vaca. Total, la agricultura
biodinámica necesita muchos animales muertos.
Además,
la agricultura biodinámica privilegia la tracción animal sobre la tracción
mecánica, empleando bueyes, mulas o caballos de tracción.
Foto: http://vernoux.org/ecodyn/wp-content/uploads/2014/04/Pulve%E2%95%A0%C3%BC-traction-animale.jpg
Los
enormes esfuerzos físicos y las posibles dolencias que supone para esos
animales, ¿son compatibles con el veganismo?
Desesperado(a),
decides que vas a producir tú mismo(a) tus frutas y hortalizas, y todos tus
alimentos, de manera totalmente natural, en tu jardín, bajo tu propia
responsabilidad y sin la ayuda de nadie, para quedar seguro(a) del origen de lo
que vas a comer.
Bueno, primero si eres urbano(a), lo que es el caso de
muchos veganos, ideología poco preciada en el campo, vas a tener que cambiar de
vida. Un jardín, para alimentar a una familia todo el año, no es fácil hacerlo
en un apartamento de dos habitaciones en el centro de la ciudad.
Borremos este inconveniente. Cambias de vida y te
instalas en el campo.
¡Vas a poder preparar tu huerta! ¡Por fin!
Hay que arrancar las malas hierbas, arar, voltear el
suelo para descompactarlo, prepararlo para dejar el sitio limpio antes de
sembrar o de plantar tus futuros alimentos. Pero labrando, vas a dañar
seriamente la fauna y la microfauna del lugar. Pero vamos, digamos que es un sacrificio
necesario.
Las plantas van a tener que alimentarse. Van a asimilar
elementos nutritivos en el suelo. ¿Pero de donde proceden esos elementos
nutritivos? De la descomposición de restos vegetales, pero también de la
descomposición de restos animales. La fauna y microfauna del suelo viven y
mueren, para después ser descompuestas y los elementos minerales que contienen
quedan puestos a disposición de la flora local.
Borremos este inconveniente, ya que es el ciclo de la
vida, y que los humanos no tienen nada que ver con ello.
Cuando
tus cultivos están instalados, los observas con ganas. ¡Qué bonitos tomates,
cereales, manzanas, calabacines y más! ¡Que gusto!
Es cierto, pero no eres el único en admirar esta
maravilla de la Naturaleza con ganas. Una cantidad alucinante de animales de
todos tipos y de todos los tamaños le pone interés, como por ejemplo caracoles,
babosas, roedores, aves, jabalíes, ciervos, pulgones, ácaros, cochinillas,
nematodos, coleópteros, lepidópteros, dípteros, hemípteros, tisanópteros, y me
dejo unos pocos atrás…
Foto: http://plandejardin-jardinbiologique.com/wa_images/lapin%20dans%20un%20potager.jpg
Te vas a encontrar con otro problema:
o bien aumentas (mucho) el tamaño de tu huerta o de tu huerto,
para que den en cantidad suficiente para ti, tu familia y para toda la
increíble fauna del lugar,
o bien tendrás que recurrir a trampas, repelentes, e
incluso, incluso, incluso… a los plaguicidas (ecológicos por supuesto).
Total,
vas a tener que agredir, repeler, o incluso matar a muy numerosos animales.
La
vida es dura. Es una lucha por los alimentos, une lucha para la supervivencia.
Y me temo mucho que el veganismo solo sea una ilusión, un
movimiento intelectual que procede sobre todo de la ignorancia del
funcionamiento de la Naturaleza. Solo somos uno de sus componentes. El ciclo
natural implica de manera obligatoria para todos los animales y todos los
vegetales, aprovechar la muerte de los demás para su propio beneficio, y luchar
día tras día, paso a paso, para su propia supervivencia y para la competencia
sobre los alimentos.
El
ser humano no puede de ningún modo descartar la explotación, voluntaria o
involuntaria de los animales. Es la ley de la Naturaleza.
Pero seamos positivos, eso no quiere decir que hay que
aceptar el maltrato animal. Al revés, estoy favorable a la imposición en
agricultura de una carta de buenas prácticas de ganadería y de buenas prácticas
de matanza.
Varios escándalos han salido a la luz recientemente y es
inaceptable, pero no creo que el rechazo al consumo de cualquier producto o
subproducto animal sea una solución.
Es una ilusión. Cada uno puede aceptar la evidencia, o
no. Pero no cabe duda.
El vegetarismo y el veganismo son seguidos, con toda la
buena fe del mundo, por personas que ignoran la realidad de las cosas, y que no
son conscientes (o que se niegan a verlo) que son ante todo, un objetivo de
marketing.
Pues sí, eres un mercado muy goloso de personas
dispuestas a pagar al mayor precio, productos de los que te crees que son
compatibles con tus convicciones.
Formas parte de los nichos de mercado, del mismo modo que
los celiacos y alérgicos de todos tipos, dejando unos márgenes muy lucrativos a
todos los productos sin gluten, sin lactosa, sin azúcar, sin fosfato, sin carne,
o veganos.
Pero
estoy seguro que eres totalmente coherente con tus convicciones.
Por este motivo, no tienes en tu casa,
Nada que sea de piel, ni sofá, ni asientos de coche, ni
cartera, ni guantes,
Nada que sea de cuerno, ni peine, no cuchillos antiguos,
Nada que sea de pelo, ni cepillo, ni pinceles, ni gorro,
ni colchón o asiento de crin, ni cuellos,
Nada que sea de marfil, ni falso marfil que es hueso,
Nada que sea de otros derivados de animales, como
pantallas hechas en vejiga, por ejemplo.
No empleas tampoco ningún producto de belleza que
contenga grasa animal.
Y por supuesto, no tienes tampoco ninguna ropa de lana,
mohair, merinos, shetland, pashmina, alpaca, angora, ni zapatos, pantalones o
chaqueta de cuero, camisas o pañuelos de seda, sin hablar desde luego de
pieles, pero es obvio.
Foto: https://potterfs.files.wordpress.com/2008/10/pasmina.jpg
Es
que es muy difícil ser realmente vegano. Hasta diría yo que es
casi imposible.
¿Cómo
se puede ser vegano?
Desde que el mundo es mundo, el ser humano es omnívoro y
mata a animales para aprovechar casi todo, la carne, la piel, los huesos o las
vísceras para sus necesidades.
Venga, seas razonable, un poco de carne, sin exceso, bien
elegida, producida por agricultores concienzudos y respetuosos, como
afortunadamente los hay mucho, procedente de animales bien criados, matados en
las mejores condiciones posibles, no me parece ser un crimen contra la
animalidad.
Enhorabuena, tu artículo tiene información muy interesante.
RépondreSupprimerImagino que muchos veganos no pueden ir tan lejos al evitar afectar a cualquier vida animal, es imposible. Seas vegano o vegetariano, o no, es importante asegurar el bienestar animal.
Un saludo
Creo que toda persona vegana sabe que es imposible no dañar de manera colateral a los demas seres que viven con nosotros en la tierra. También creo que a lo que se apunta con el movimiento es a terminar con la explotación de animales de manera INDUSTRIAL, ya que ademas se desperdicia muchisimo alimento en el proceso.
RépondreSupprimerEntiendo tu punto y estoy de acuerdo en varias de las cuestiones que planteas, pero tambien creo que aunque no se logre al 100%, se puede evitar el sufrimiento de muchos seres al pasarse a una alimentacion basada en plantas. No digo los productos de las gondolas que venden a precios exorbitantes por ser veganos, sino alimentacion mas consciente y saludable en la que no se le este pagando a un ser para que mate a otro de la manera en que se hace en las granjas industriales.
Espero que estemos de acuerdo en que intentamos hacer de este un mundo mejor y ser parte de la naturaleza sin creenos amos y señores del mundo, que por cierto ya bastante hemos destruido.
Saludos!
No es ninguna excusa pero por el simple hecho de estar vivos ya estamos matando a un montón de animalitos "invisibles" que nos rodean: al pisar, al andar, al sentarnos, al acostarnos...Por otra parte, en un mundo vegano ¿que pasa con la agricultura?. ¿No habría una sobreexplotación agrícola?.¿No se produciría una deforestación?
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