dimanche 26 novembre 2017

119- Reformar el ecológico no es tan natural

REFORMAR EL ECOLÓGICO NO ES TAN NATURAL

El pasado 8 de Noviembre el diario belga La Libre Belgique  publicaba un corto y conciso dosier sobre la reforma de la reglamentación europea de agricultura ecológica, que estuvo a punto de fracasar.
Es interesante echarle un vistazo a la situación, ahora que la reforma, por fin ha sido adoptada, el pasado 20 de noviembre.
Puedes leer la reacción del comisario europeo a la agricultura, Phil Hogan, después del voto http://europa.eu/rapid/press-release_STATEMENT-17-4727_es.htm



Las nuevas reglas del ecológico en Europa: Porque no avanza:

Europa quiere revisar su legislación sobre ecológico. El voto, el 20 de noviembre, se ve muy incierto. Revisión de las reformas propuestas y de lo que bloquea.

Negociaciones. Si la reforma del ecológico desemboca, habrá sido es proceso legislativo más largo de toda la historia de la Unión europea. Es que 18 trílogos habrán sido necesarios para llegar, el 28 de junio, a la actual propuesta. Todo empezó muy mal ya que el sector de la agricultura ecológica se opuso fuertemente a cualquier cambio legislativo. En 2007, la primera reglamentación había sido muy criticada ya que se apoyaba sobre el mínimo denominador común. Pero después había sido duramente defendida por el sector ecológico, frente al proyecto de nuevas reglamentaciones. Las negociaciones, iniciadas en 2105, fueron especialmente laboriosas ya que los Estados miembros defendían solo sus peticiones particulares. Provoco repetidas crisis en el seno de Consejo europeo y parones en el proceso de negociación.


Las grandes novedades en 7 puntos:
Al término de casi tres años de intensas negociaciones, el Consejo europeo votara, el 20 de Noviembre, una reforma de la legislación sobre ecológico. Un voto cuyo resultado es muy dudoso, los intereses particulares de determinados Estados miembros pareciendo ser incompatibles. Si el texto se aprueba, será de aplicación a partir del 1 de julio de 2020. A continuación las grandes novedades.

1-    Ningún umbral de productos químicos (todavía) autorizado.
Bélgica, Italia, Chequia y Eslovaquia han implantado umbrales de productos químicos (plaguicidas, abonos), no autorizados en agricultura ecológica, en los alimentos ecológicos. La Comisión europea (y Bélgica que ha practicado un lobby intenso, uniendo varios pequeños países a su causa) quería que sea una norma en el seno de la Unión. Pero ha sido rechazado especialmente por Alemania y Francia, que temían que el marchamo ecológico pierda su autenticidad.
En su sitio, la reforma prevé medidas de precaución reforzadas para evitar cualquier contaminación por productos químicos. Si una sospecha de contaminación afecta al producto, no podrá llevar la marca ecológica, el tiempo que la investigación demuestre eventualmente lo contrario, los cuatro países que tienen umbrales podrán mantenerlos. En un máximo de cuatro años, la Comisión producirá un informe sobre los motivos de las contaminaciones y podría decidir una armonización legislativa (umbrales o no umbrales para los 28 estados miembros).

2-    La agricultura hidropónica queda prohibida
Los Países Bálticos y Holanda querían conseguir que se pueda hacer cultivo ecológico sin suelo pero no lo pudieron. Las producciones hidropónicas siguen prohibidas en agricultura ecológica pero tres países (Suecia, Dinamarca y Finlandia) se benefician de una derogación durante diez años. Solo afecta una superficie total de 20 hectáreas.


3-    Las reglas de equivalencia para el ecológico no europeo desaparecen.
Era una aberración a escala del planeta, denunciada por la Organización Mundial del Comercio. Para los productos ecológicos que importa, la UE reconoce organismos de control fuera de la Unión para la certificación de productos ecológicos, siguiendo reglas de producción equivalentes. La reforma terminara progresivamente con esto. A partir de 2015, los países fuera de la UE tendrán que cumplir con el protocolo ecológico europeo si quieren vender sus producciones en los mercados europeos. Derogaciones serán posibles para determinados productos como los plátanos.

4-    El acceso a las semillas se hace más fácil.
Las variedades tradicionales, hoy por hoy prohibidas a la venta, y variedades especialmente creadas para ser adaptadas a este tipo de producción, serán disponibles para la agricultura ecológica.

5-    Controles reforzados en las fincas.
Actualmente, los productores son controlados en el terreno y sobre documentación, una vez al año, con el fin de verificar si no hacen trampas. También son objetos de controles por sorpresa. Con la reforma, los controles serán basados sobre un análisis de riesgos sistemático. Los controles anuales y por sorpresa serán mantenidos pero sin ninguna irregularidad se observa durante tres años, el control en el terreno solo se hará cada dos años. Al revés, si se observan anomalías repetidas, los controles serán intensificados.

6-    Los pequeños productores se agrupan.
La nueva legislación autoriza la formación de agrupaciones de productores, en las que se pone en común la infraestructura y el material. De esta manera, los pequeños agricultores podrán mutualizar sus costes de producción y de acreditación en ecológico, que es elevado.

7-    Nuevos productos certificados.
Se trata de los conejos, de los cérvidos, aceites esenciales, corcho, algodón, sal o lana.


3 PREGUNTAS A
Blanche Magarinos-Rey.
Abogada especializada en derecho medioambiental.

Defiendes la proposición de reforma de la legislación sobre ecológico. ¿Por qué?
El texto contiene progresos reales sobre las semillas, la biodiversidad, por ejemplo. La eliminación de las reglas de equivalencia con los países terceros podrá permitir desarrollarse al ecológico europeo ya que, en la actualidad, 50% de los productos ecológicos vendidos en la Unión europea se importan. Si este compromiso fuera rechazado, sería, en mi opinión, una auténtica catástrofe, un desastre. Es poco probable que la Comisión vuelva a trabajar en un nuevo proyecto de reforma. Nos quedaríamos pues, con la legislación de 2007 con sus imprecisiones, sus derogaciones, el sistema desequilibrado de importaciones de productos ecológicos, etc.”
(Las otras preguntas afectan al voto en sí y al caso específico de Bélgica).


En los aspectos técnicos, es de notar la prohibición de los cultivos sin suelo. Este punto me parece especialmente discutible, en la medida en que esta técnica permite la puesta en práctica de una agricultura confinada, totalmente fuera del alcance de las enfermedades y de las plagas, y en consecuencia una total ausencia de necesidad de empleo de pesticidas ni sintéticos, ni naturales. Es cierto que el aspecto nutricional es todavía difícil, pero grandes avances han sido realizados en este aspecto, haciendo que la nutrición orgánica sea ahora posible en hidroponía.
Los cultivos sin suelo también permiten la valorización de zonas incompatibles con la agricultura, con una utilización óptima de los recursos hídricos, casi sin desperdicio (todo es recuperado, compostado y reciclado, desde los sustratos a las soluciones nutritivas, pasando por los plásticos y los restos de los cultivos anteriores), con unas productividades muy elevadas por unidad de superficie, y la posibilidad de producir localmente alimentos sanos a todo lo largo del año. Es una agricultura moderna, eficiente, casi sin efecto negativo sobre el medioambiente ni la salud humana.


Me parece una lástima eliminar a priori una vía interesante de la que parece evidente que a corto o medio plazo, seremos capaces de llevarla de una manera totalmente compatible con la agricultura ecológica.
También existe un número creciente de proyectos de agricultura urbana sin suelo que no van a poder beneficiarse del sello ecológico, aunque las técnicas empleadas parecen estar en acuerdo con la filosofía, a parte de la ausencia de suelo.
Me parece perjudicial tanto para los productores como para los consumidores.
En mi opinión, es un grave error, típica de una ideología que tiene una visión reductora, estrictamente limitada a la aplicación tonta del dogma.


Pero vamos, la reforma fue finalmente votada. Pero ¡a qué precio!
Hemos estado muy cerca de un bloqueo por puro inmovilismo, para defender intereses particulares en detrimento del interés común.

Esto me refuerza en la ida de menos Estado, más Europa. Total, si queremos hacer que Europa funcione verdaderamente, hay que sacarla de sus disputas de campanario. Solo entorpecen el buen funcionamiento del sistema, y a fin de cuenta, el perjuicio siempre recae sobre los habitantes y sobre las empresas que dependen de esas decisiones políticas.

Sabes que no soy un fanático de lo ecológico, no tanto en lo que a producción se refiere, sino en lo que afecta a su comunicación. Se trata en primer lugar de una amplia manipulación de la opinión pública, basada en un dogma según el cual todo lo que es natural es bueno para la salud y no contaminante. En sí es una tontería, pero sobre todo, da lugar a un montón de abusos bajo el único pretexto que “es natural”.
Sin embargo, lo ecológico es una vía que toma cada día mayor protagonismo, que afecta a una parte cada vez mayor de la alimentación, tanto en Europa como en el resto del mundo. También es una línea directriz que habrá tenido el gran mérito de cuestionar muchas prácticas criticables en todas las ramas de la actividad humana. La agricultura está ganando en sostenibilidad en parte gracias a los aportes técnicos procedentes de la reflexión sobre la producción ecológica.

La Unión europea es actualmente un ejemplo en materia de exigencia, de control y de seriedad en materia de legislaciones referentes al medioambiente, los pesticidas, la salud, la calidad de los alimentos.
Muy poco ha faltado para que se quede atrás en materia de agricultura ecológica.

Un poco de armonización no viene nada mal, para que los consumidores no se pierdan tanto, y para que los agricultores puedan trabajar con medios mejor adaptados, y mejor controlados.

Imagen: http://bi.gazeta.pl/im/78/17/c3/z12785528Q,Warzywa.jpg

119- Réformer le bio n'est pas si naturel

REFORMER LE BIO N’EST SI PAS NATUREL

Le 8 Novembre dernier le quotidien belge La Libre Belgique publiait un court et concis dossier sur la réforme de la règlementation européenne de l’agriculture biologique, qui a failli échouer.
Il est intéressant de revenir sur la situation, maintenant que la réforme a enfin été adoptée, le 20 novembre dernier.
Vous pouvez lire la réaction du commissaire européen à l’agriculture, Phil Hogan après ce vote http://europa.eu/rapid/press-release_STATEMENT-17-4727_fr.htm


Ce dossier a été préparé par Isabelle Lemaire.

« Les nouvelles règles du bio en Europe : pourquoi ça coince.

L’Europe veut revoir sa législation sur le bio. Le vote, le 20 novembre, s’annonce très incertain. Tour d’horizon des réformes proposées et de ce qui coince.

Négociations. Si la réforme de bio aboutit, elle aura été le processus législatif le plus long de toute l’histoire de l’Union européenne. Il aura en effet fallu 18 trilogues pour aboutir, le 28 juin, à la proposition actuelle. Tout a très mal commencé puisque le secteur du bio s’est d’emblée vivement opposé à un changement législatif. En 2007, la première règlementation avait été vivement critiquée car elle s’appuyait sur le plus petit dénominateur commun. Mais elle a depuis été âprement défendue par le secteur du bio, face au projet de nouvelles règlementations. Les négociations, entamées en 2015, ont été particulièrement laborieuses car les États membres défendaient à tous crins leurs demandes particulières. Cela a provoqué des crises à répétition au sein du Conseil européen et des arrêts du processus de discussion.


Les grandes nouveautés en 7 points :
Au terme de près de trois années d’intenses négociations, le Conseil européen votera, le 20 novembre, une réforme de la législation sur le bio. Un vote dont l’issue est très incertaine, les intérêts particuliers de certains États membres semblant inconciliables. Si le texte passe, il sera d’application dès le 1er juillet 2020. En voici les grandes nouveautés.

1-    Pas (encore) de seuils de produits chimiques autorisés.
La Belgique, l’Italie, la Tchéquie et la Slovaquie ont mis en place des seuils de produits chimiques (pesticides, engrais), non-autorisés en agriculture biologique, dans les denrées bio. La Commission européenne (et la Belgique qui a pratiqué un lobby intensif, ralliant plusieurs petits pays à sa cause) voulait en faire la norme au sein de l’Union. Mais cela a été refusé par l’Allemagne et la France notamment, qui craignaient que le label bio y perde en authenticité.
À la place, la réforme prévoit des mesures de précaution renforcées afin d’éviter toute contamination par des produits chimiques. Si un soupçon de contamination pèse sur le produit, il ne pourra pas être libellé bio, le temps qu’une enquête prouve éventuellement le contraire. Les quatre pays qui ont des seuils pourront les maintenir. Dans quatre ans maximum, la Commission produira un rapport sur les raisons des contaminations et pourrait décider d’une harmonisation législative (seuils ou pas seuils pour les 28 États membres).

2-    L’agriculture hors-sol est interdite
Les pays baltes et les Pays-Bas voulaient obtenir de faire de la culture bio hors-sol mais ils n’ont pas eu gain de cause. Les productions hydroponiques en agriculture biologique restent interdites mais trois pays (Suède, Danemark et Finlande) bénéficieront d’une dérogation pendant dix ans. Cela ne concerne qu’une surface de 20 hectares en tout.


3-    Les règles d’équivalence pour le bio non-européen sont supprimées.
C’était une aberration à l’échelle planétaire, dénoncée par l’Organisation Mondiale du Commerce. Pour les produits bio qu’elle importe, l’UE reconnaît des organismes de contrôle en dehors de l’UE pour la certification de produits bio répondant à des règles de production équivalentes. La réforme y mettra progressivement un terme. Dès 2025, les pays hors UE devront respecter le cahier des charges européen du bio s’ils veulent vendre leurs produits sur les marchés européens. Des dérogations seront possibles pour certains produits comme les bananes.

4-    L’accès aux semences est facilité.
Les variétés traditionnelles, aujourd’hui interdites à la vente, et des variétés spécialement créées pour être adaptées à ce type de production seront disponibles pour l’agriculture biologique.

5-    Contrôles dans les fermes renforcés.
Actuellement, les producteurs sont contrôlés sur le terrain et sur dossier, une fois par an, afin de vérifier s’ils ne fraudent pas. Ils font aussi l’objet de contrôles inopinés. Avec la réforme, les contrôles seront basés sur une analyse des risques systématique. Les contrôles annuels et inopinés seront maintenus mais si aucune irrégularité n’est constatée pendant trois ans, le contrôle de terrain n’aura plus lieu que tous les deux ans. Par contre, si des anomalies répétées sont constatées, les contrôles s’intensifieront.

6-    Les petits producteurs se regroupent.
La nouvelle législation autorise la formation de groupements de producteurs, où l’on met en commun l’infrastructure et le matériel. Les petits agriculteurs pourront ainsi mutualiser leur coût de production et de certification bio, qui est très élevé.

7-    De nouveaux produits labellisés
Il s’agit des lapins, cervidés, huiles essentielles, le liège, coton, sel ou la laine. 


3 QUESTIONS À
Blanche Magarinos-Rey.
Avocate spécialisée en droit de l’environnement.

Vous défendez la proposition de réforme de la législation sur le bio. Pourquoi ?
Le texte comporte de réelles avancées sur les semences, la biodiversité par exemple. La suppression des règles d’équivalence avec les pays tiers pourra permettre au bio européen de se développer puisque, à l’heure actuelle, 50% des produits bio vendus dans l’Union européenne sont importés. Si ce compromis est rejeté ce serait, à mon sens, une véritable catastrophe, un gâchis. Il est peu probable que la Commission planche sur un nouveau projet de réforme. On gardera alors la législation de 2007 avec ses imprécisions, ses dérogations, le système bancal des importations de produits bio, etc. »
(Les autres questions concernent le vote en lui-même et le cas particulier de la Belgique).


Sur le plan technique, il est à noter l’interdiction des cultures hors-sol. Ce point me parait particulièrement discutable, dans la mesure où cette technique permet de mettre en pratique une agriculture confinée, totalement hors d’atteinte des maladies et ravageurs, donc une absence totale de besoin l’emploi de pesticides, ni synthétiques, ni naturels. Il est vrai que l’aspect nutritionnel est encore difficile, mais de grands progrès ont été réalisés dans ce domaine, rendant une nutrition organique possible en hydroponie.
Les cultures hors-sol permettent aussi de mettre en valeur des zones incompatibles avec l’agriculture, avec une utilisation optimale des ressources en eau, presque sans aucun gaspillage (tout y est récupéré, composté et recyclé, des substrats aux solutions nutritives, en passant par les plastiques et les restes des cultures antérieures), avec des productivités très élevées par unité de surface, et la possibilité de produire localement des aliments sains tout au long de l’année. C’est donc une agriculture moderne, performante, pratiquement sans effet négatif sur l’environnement ni sur la santé humaine.


Il me semble dommage d’éliminer a priori une voie intéressante dont il paraît évident qu’à court ou moyen terme, on sera capable de la conduire de manière totalement compatible avec l’agriculture biologique.
Il existe aussi un nombre croissant de projets d’agriculture urbaine hors-sol qui ne pourront désormais pas bénéficier du label bio, même si les techniques employées semblent être en accord avec la philosophie, mise à part l’absence de sol.
Ça me parait dommageable à la fois pour les producteurs et pour les consommateurs.
A mon avis, c’est une grossière erreur, typique d’une idéologie à la vision réductrice, strictement limitée à l’application bête et méchante du dogme.


Mais bon, la réforme a finalement été votée. Mais à quel prix !
Nous sommes passés à deux doigts d’un blocage par pur immobilisme, pour défendre des intérêts particuliers au détriment de l’intérêt commun.

Ça me renforce encore dans l’idée de moins d’État, plus d’Europe. Bref, si on veut que l’Europe fonctionne vraiment, il faut la sortir de ces querelles de clocher. Elles ne font qu’entraver le bon fonctionnement du système, et au bout du compte, le préjudice se reporte toujours sur les habitants et sur les entreprises qui dépendent de ces décisions politiques.

Vous savez que je ne suis pas un fanatique du bio, non pas en ce qui concerne la production, mais en ce qui concerne sa communication. Il s’agit avant tout d’une vaste manipulation de l’opinion publique, basée sur un dogme selon lequel tout ce qui est naturel est bon pour la santé et non-contaminant, et tout ce qui est synthétique est mauvais et contaminant. En soi c’est une ânerie, mais surtout ça donne lieu à toutes sortes d’abus sous le seul prétexte que « c’est naturel ».
Pourtant, le bio est une voie qui prend chaque jour plus d’ampleur, qui concerne une part grandissante de l’alimentation, tant en Europe que dans le reste du monde. C’est aussi une ligne directrice qui aura eu le grand mérite de remettre en cause beaucoup de pratiques critiquables dans toutes les branches de l’activité humaine. L’agriculture est en train de gagner en durabilité en partie grâce aux apports techniques issus de la réflexion sur la production biologique.

L’Union européenne est actuellement un exemple en matière d’exigence, de contrôle et de sérieux en matière de législations concernant l’environnement, les pesticides, la santé, la qualité de l’alimentation.
Il s’en est fallu de très peu qu’elle demeure à la traine en matière d’agriculture biologique.

Un peu d’harmonisation ne fera pas de mal, afin que les consommateurs s’y retrouvent un peu mieux, et afin que les agriculteurs puissent travailler avec des moyens plus adaptés, et mieux contrôlés.

Image: http://bi.gazeta.pl/im/78/17/c3/z12785528Q,Warzywa.jpg

119- Reforming organic is not so natural

REFORMING ORGANIC IS NOT SO NATURAL

On November 8, the Belgian daily La Libre Belgique published a short and concise dossier on the reform of the European regulation of organic farming, which nearly failed.
It is interesting to come back to the situation now that the reform was finally adopted on November 20th.
You can read the reaction of the European Commissioner for Agriculture, Phil Hogan after this vote http://europa.eu/rapid/press-release_STATEMENT-17-4727_en.htm


This dossier (in French) was prepared by Isabelle Lemaire.

"New rules of organic in Europe: why it blocks.

Europe wants to review its organic legislation. The vote, November 20, looks very uncertain. An overview of the proposed reforms and what is stuck.

Negotiations. If the organic reform succeeds, it will have been the longest legislative process in the history of the European Union. It will have taken 18 trilogues to reach the current proposal on June 28th. Everything started very badly since the organic sector was immediately opposed to a legislative change. In 2007, the first regulation was strongly criticized because it was based on the lowest common denominator. But it has since been bitterly defended by the organic sector, facing the project of new regulations. The negotiations, which began in 2015, were particularly laborious as Member States were defending their particular demands. This has provoked repeated crises in the European Council and stops in the discussion process.


The big novelties in 7 points:
After nearly three years of intense negotiations, the European Council will vote on 20 November to reform organic legislation. A vote whose outcome is very uncertain, the particular interests of some Member States seem irreconcilable. If the text passes, it will apply from July 1, 2020. Here are the major novelties.

1-    No (yet) thresholds of authorized chemicals.
Belgium, Italy, the Czech Republic and Slovakia have established thresholds for chemicals (pesticides, fertilizers), not authorized in organic farming, in organic foodstuffs. The European Commission (and Belgium which has been lobbying intensively, rallying several small countries to its cause) wanted to make it the norm within the Union. But this was rejected by Germany and France in particular, who feared that the organic label lost authenticity.
Instead, the reform provides for enhanced precautionary measures to prevent contamination by chemicals. If a suspicion of contamination weighs on the product, it will not be able to be worded organic, the time that an investigation possibly proves the opposite. The four countries with thresholds will be able to maintain them. In a maximum of four years, the Commission will produce a report on the reasons for the contaminations and may decide on legislative harmonization (thresholds or no thresholds for the 28 Member States).

2-    Hydroponic agriculture is forbidden.
The Baltic countries and the Netherlands wanted to obtain the possibility to grow organic hidroponic crops, but they did not win. Hydroponic production in organic farming is still banned, but three countries (Sweden, Denmark and Finland) will have a derogation for ten years. This only concerns an area of ​​20 hectares in all.


3-    Equivalence rules for non-European organic are deleted.
It was an aberration on a global scale, denounced by the World Trade Organization. For the organic products it imports, the EU recognizes control bodies outside the EU for the certification of organic products that meet equivalent production rules. The reform will gradually put an end to it. By 2025, countries outside the EU will have to respect the European organic specifications if they want to sell their products on the European markets. Derogations will be possible for certain products such as bananas.

4-    Access to seeds is facilitated.
Traditional varieties, now banned for sale, and varieties specially created to be adapted to this type of production will be available for organic farming.

5-    Reinforced controls in farms.
Currently, growers are checked on the field and on file, once a year, to control if they are not cheating. They are also subject to unannounced checks. With the reform, controls will be based on a systematic risk analysis. Annual and unannounced inspections will be maintained, but if no irregularities are found for three years, the field control will only take place every two years. On the other hand, if repeated anomalies are detected, controls will intensify.

6-    Small growers get together.
The new legislation allows for the formation of grower groups, where infrastructure and equipment are pooled. Small farmers will be able to pool their cost of production and organic certification, which is very high.

7-    New labeled products.
These are rabbits, cervids, essential oils, cork, cotton, salt or wool.


3 QUESTIONS TO
Blanche Magarinos-Rey.
Lawyer specialized in environmental law.

You defend the proposal for reform of the organic legislation. Why?
The text includes real advances on seeds, biodiversity for example. Removing the equivalence rules with third countries may allow European organic produce to grow, because currently 50% of organic products sold in the European Union are imported. If this compromise is rejected it would be, in my opinion, a real disaster, a mess. The Commission is unlikely to plan a new reform project. We will keep the 2007 legislation with its inaccuracies, its derogations, the wobbly system of imports of organic products, etc."
(The other questions concern the vote itself and the particular case of Belgium).


On a technical level, it's worth noting the ban on soilless crops. This point seems to me particularly debatable, insofar as this technique makes possible to put in practice a confined agriculture, totally out of reach of diseases and pests, thus a total absence of need of use of pesticides, neither synthetic nor natural. It's true that the nutritional aspect is still difficult, but great progress has been made in this area, making organic nutrition possible in hydroponics.
Soilless crops also help to develop areas that are incompatible with agriculture, with optimal use of water resources, almost without waste (everything is recovered, composted and recycled, from substrates to nutrient solutions, and also plastics and remains of past crops), with very high productivities per unit area, and the possibility of being locally producing healthy food throughout the year. It's a modern, high-performance agriculture with virtually no negative impact on the environment or human health.


It seems to me a shame to eliminate a priori an interesting path which it seems obvious that in the short or medium term, we will be able to conduct it in a manner fully compatible with organic farming.
There is also an increasing number of soilless urban agriculture projects that won't be able to benefit from the organic label, even if the techniques used seem to be in agreement with the philosophy, apart from the absence of soil.
I think it's damaging for both producers and consumers.
In my opinion, it's a gross error, typical of an ideology with a reductive vision, strictly limited to the stupid and malicious application of dogma.


But well, the reform was finally voted. But at what cost!
We have passed on the verge of a blockage by pure immobilism, to defend special interests to the detriment of the common interest.

It strengthens me even more in the idea of ​​less state, more Europe. In short, if we want Europe to really work, we have to get it out of these parochial quarrels. They only impede the proper functioning of the system, and ultimately the harm always shifts to the people and the businesses that depend on those political decisions.

You know that I'm not a fanatic of organic, not in terms of production, but in terms of communication. It's above all a large manipulation of the public opinion, based on a dogma according to which all what is natural is good for health and non-contaminating, and all what is synthetic is bad and contaminating. In itself it's a nonsense, but above all it gives rise to all kinds of abuse under the sole pretext that "it is natural".
However, organic food is becoming increasingly important, with a growing share of food in Europe and the rest of the world. It's also a guideline that has had the great merit of challenging many practices that are open to criticism in all branches of human activity. Agriculture is gaining in sustainability partly thanks to technical inputs from organic production thinking.

The European Union is currently an example in terms of requirements, control and seriousness about legislation concerning the environment, pesticides, health, and quality of food.
It came close that it could have stayed lagging behind in organic agriculture.

A bit of harmonization will not hurt, so that consumers are not so lost, and so that farmers can work with more appropriate means, and better controlled.

Picture: http://bi.gazeta.pl/im/78/17/c3/z12785528Q,Warzywa.jpg

mardi 7 novembre 2017

118- El espíritu de las plantas -10- Nubes

EL ESPIRITU DE LAS PLANTAS – NUBES

Hace mucho tiempo, en el siglo pasado (a principio de los 90s), tuve la ocasión de hacer un viaja a Chipre, preciosa isla del Mediterráneo, con un pasado histórico especialmente rico. Me había entonces llamado la atención la increíble cantidad de plantaciones de árboles forestales en todas las zonas no agrícolas, especialmente las zonas de montaña, a veces instaladas en terrazas.
Me habían explicado que se trataba de un plan gubernamental para frenar la evolución del clima local. Las lluvias se hacían cada vez más escasas, y la isla se encaminaba poco a poco hacia un importante riesgo de desertificación.


Se sabe empíricamente, y desde mucho tiempo, que los bosques favorecen la aparición de lluvias, hasta el punto que varios países con un clima árido, como es el caso de Chipre, han lanzado programas de reforestación, a veces muy ambiciosos, cuyo objetivo es de intentar aumentar la pluviometría, además de frenar la erosión y la pérdida de fertilidad de los suelos.

Lo que ahora se sabe, gracias a la experiencia Cloud, una serie de trabajos científicos llevados por el CERN, en Ginebra (Suiza), es cómo se produce este fenómeno.
Te aconsejo la lectura del artículo original (en francés), por los numerosos links y explicaciones que incluye.

“Clima: según el CERN, los árboles influyen sobre la formación de las nubes.

Cómo lo mostraban en 2016 los resultados de la experiencia Cloud, del CERN, los árboles serían mucho más aptos de lo que se pensaba para fabricar nubes y refrescar el clima. Su acción pasa por los aerosoles.

Desde 2009, la experiencia Cloud, instalada en el CERN, en Ginebra, simula diferentes condiciones de presión y de temperaturas para estudiar mecanismos que actúan en la atmosfera terrestre, y especialmente el efecto de los aerosoles sobre el clima. Esas pequeñas partículas actúan como “semillas de nubes”, favoreciendo la condensación del vapor de agua en gotitas y en consecuencia la formación de nubosidad. Globalmente, el efecto sobre el clima es refrescante ya que gran parte de la luz solar es reflectada hacia arriba.


La mitad de esos aerosoles son partículas de polvo procedentes de la tierra y de las sales marinas emitidas por los océanos, y la otra mitad son moléculas de gas que se agregan en partículas de 50 a 100 nanómetros. Es el caso del ácido sulfúrico (SO2). En la actualidad, este gas es producido en grandes cantidades por las actividades industriales. Esos aerosoles de origen humano, ya que crean más nubes, tienen un efecto refrescante, que reduce el efecto de calentamiento del dióxido de carbono (CO2). Es un forzamiento radiactivo. Los árboles son también actores de esta maquinaria, con moléculas, como el pineno, liberadas en el aire, y que también juegan el papel de núcleos de condensación.
Las cantidades actuales de emisiones de dióxido d azufre complican el estudio de la atmosfera preindustrial, que era diferente. Es lo que hizo un equipo de Cloud, que se basó sobre los resultados de esta experiencia para elaborar una simulación de la atmosfera preindustrial. Sus conclusiones, publicadas en los Pnas http://www.pnas.org/content/113/43/12053.abstract (y discutidas en un artículo de The Conversation https://theconversation.com/trees-are-much-better-at-creating-clouds-and-cooling-the-climate-than-we-thought-66713), detallan los estudios anteriores (…).


Según esos resultados (todavía por confirmar, indican los autores), las cantidades de aerosoles presentes en la atmosfera de antes de 1750 han sido hasta ahora subestimados, ya que los aerosoles emitidos por los árboles son mucho más efectivos de lo que se pensaba para fabricar nubes. En consecuencia, el efecto enfriador de los aerosoles de origen industrial sería más débil de lo previsto, de aproximadamente 27%.
Los autores deducen también que limitar las emisiones de aerosoles por las actividades humanas podría reducir su acción refrescante. Pero esta reducción podría ser compensada por la acción de los árboles, que solo piden volver a la importancia que tenían antes del era preindustrial. En resumen, los bosques tienen la capacidad de ayudarnos a limitar el calentamiento climático…”

Pues a la vista de esta muy interesante experiencia, ¿qué pasa con la evolución del clima de Chipre?

Encontré datos climáticos históricos sobre la página web del Banco Mundial http://sdwebx.worldbank.org/climateportal/
Ahí encontré dos informaciones, la acumulación de lluvia y la media de temperaturas, para el periodo 1901-2015. Aquí están las curvas:



El análisis de las curvas muestra una tendencia clara al aumento de las temperaturas, pero una tendencia menos clara en cuanto a la pluviometría. Porque si las lluvias tienden a ser menos frecuentes (la curva de tendencia está clara), también son mucho más aleatorias. Los años de lluvias escasas son más frecuentes pero también lo son los años de lluvias abundantes. Total, en cuanto a la pluviometría, los años medios casi han dejado de existir.

De evidencia, los efectos de esas reforestaciones no saltan a la vista. Se pueden imaginar muchos motivos posibles. Personalmente, me imagino que gran parte de responsabilidad viene de la edad de los árboles. Tienen más o menos 25 años (para los que han sido plantados en los años 90), y es todavía muy joven. Además, sus primeros años, con toda seguridad, no han sido un camino de flores, como suele ser el caso de las reforestaciones en regiones áridas, con dificultades de supervivencia en los primeros años por falta de lluvia durante los 3 o 4 meses de verano, y mortandades a menudo numerosas de jóvenes árboles, a las que se suman probablemente ataques parasitarios, como puede ser el caso de algunos insectos de plantas débiles, o de salud precaria. Está claro que una reforestación es un trabajo a muy largo plazo, especialmente en regiones áridas.

Salvo que, la bajada de la pluviometría, proporcionalmente menos fuerte de lo que es la subida de las temperaturas, sea una señal de un buen efecto de esas reforestaciones. En cual caso, la desertificación de Chipre habría ya progresado mucho, si este programa no se hubiera iniciado suficientemente temprano.


Dicho eso, y para volver al tema de los aerosoles, este trabajo, muy interesante dará probablemente lugar a investigaciones complementarias, para estudiar la producción de aerosoles según la edad, el desarrollo, y sobre todo según la especie vegetal. Me imagino, como es el caso de muchas cosas con los seres vivos, que existe una gran variabilidad de producción de aerosoles según la especie vegetal. Algún día se elaborará una lista de especies más aptas para luchar contra la desertificación por la abundancia de su producción de aerosoles.

Entonces los humanos se encontrarán una vez más delante una elección ecológica difícil, como la que te contaba en un artículo ya antiguo, a propósito del necesario ahorro de agua dulce y de sus consecuencias medioambientales (http://culturagriculture.blogspot.com.es/2014/12/34-agua-y-riego-3-caso-de-conciencia.html).


¿Tendremos que plantar masivamente especies vegetales por su capacidad a favorecer las lluvias, incluso fuera de sus regiones de origen?
¿Qué desequilibrios vamos a provocar en la biodiversidad local por culpa de la implantación de esas especies?
¿Los desequilibrios provocados pueden ser preferibles a una desertificación?

El eterno problema de la elección… y de sus consecuencias.


A la espera de tener que elegir, la fundación GreenCyprusCom sigue trabajando para la reforestación de la isla de Chipre, con especies autóctonas. Es mucho tiempo, lento, laborioso y costoso, pero necesario.